CHIKUNG: Principios y conceptos importantes
"Chi" significa energía o más aproximadamente "fuerza vital" y "kung" significa "trabajo continuado". Así chikung (qigong escrito en el sistema pinyin) significa "trabajo con la fuerza vital" o "trabajo con la energía".
Uno de los principios básicos del chikung es un correcto alineamiento de la estructura ósea. Así, la práctica de base del chikung es la postura del árbol (ma bo), en donde se coloca cada hueso en la mejor posición posible de manera que la columna está alineada y con suficiente espacio entre las vértebras, los pies están bien asentados y la cabeza erguida. Esta postura reeduca la manera en cómo solemos colocar el cuerpo evitando a la larga malas posturas que son caldo de cultivo para dolores de espalda, cervicales, etc.
A nivel energético, el correcto alineamiento conecta la energía de Cielo y Tierra que se unifican en el medio, es decir, el ser humano.
El segundo principio del chikung es recuperar el centro. El centro geográfico del cuerpo lo encontramos en el vientre, a la altura del ombligo y entre el mismo y la espalda. Es ahí en donde se enfoca la respiración relajando de esta manera la zona del pecho y liberando al corazón de presión y ansiedad. Es también el lugar en donde se cultiva y almacena de manera segura la energía estableciendo un centro estable y abundante de fuerza vital.
El segundo principio del chikung es recuperar el centro. El centro geográfico del cuerpo lo encontramos en el vientre, a la altura del ombligo y entre el mismo y la espalda. Es ahí en donde se enfoca la respiración relajando de esta manera la zona del pecho y liberando al corazón de presión y ansiedad. Es también el lugar en donde se cultiva y almacena de manera segura la energía estableciendo un centro estable y abundante de fuerza vital.
El tercer principio básico es la fluidez. El cuerpo debe buscar el máximo de relajación y el movimiento continuo que nace en la Tierra y se transmite a los pies, piernas, caderas, tronco y brazos. La relajación permite el paso de un buen caudal de energía y el movimiento continuo permite soltar las tensiones y bloqueos que limitan la circulación de la misma.
"La mente guía la fuerza vital, la fuerza vital empuja la sangre"
El principio padre de todo es la conciencia, el sentir el cuerpo físico y energético en su totalidad.
CANAL CENTRAL
Si cultivamos la actitud de mirar hacia dentro y a estabilizar la postura, observando, mirándonos atentamente podremos comenzar a sentir y a desarrollar este eje energético que nos va a conducir a vivir desde una profunda conexión interna, dando lugar a potenciar nuestra capacidad, fuerza, plenitud, paz interior....
Nuestro campo energético se nutre de las energías del cielo y de la tierra a través del Canal Central de Energía. Este canal recorre nuestra estructura energética desde la cabeza hasta el perineo. En realidad, se extiende mucho más arriba, hacia el cosmos, y mucho más abajo, hacia el interior de la tierra.
Nuestro campo energético se nutre de las energías del cielo y de la tierra a través del Canal Central de Energía. Este canal recorre nuestra estructura energética desde la cabeza hasta el perineo. En realidad, se extiende mucho más arriba, hacia el cosmos, y mucho más abajo, hacia el interior de la tierra.
Al activar este eje al que denominamos Canal Central, según el Tao, nos estamos uniendo al Cielo, que es inspiración, belleza, armonía y a la Tierra, que es arraigo, seguridad, fuerza, voluntad, poder personal, capacidad. Así pues, cuándo unimos y estabilizamos estos dos factores inevitablemente vamos hacia dentro, hacia el Ser interior, puesto que nos hace entrar directamente en conexión con nosotros mismos y cuanto más se vive este ir hacia dentro más uno mismo es, más auténtico es, puesto que la conexión con el yo profundo, el yo real, es lo que nos da la capacidad de plenitud, de ser uno mismo.
Así pues Uniendo Cielo y Tierra, es decir, desarrollando el Canal Central, activamos la conexión con el Ser y esto inevitablemente nos hace vivir en un estado de calma, de seguridad, de positividad, de fuerza interna.
Dado que vivimos en una sociedad en la que el estrés, la ansiedad y demás estados negativos están muy presentes. La mayoría de las personas vivimos en la mente y por lo tanto nos identificamos con los miedos y de ahí surge la angustia, depresión... sin embargo si podemos conectarnos con nuestro Yo profundo, con nuestra verdadera naturaleza que es esencialmente positiva, el miedo y todos sus derivados cómo la ansiedad se irán disipando. Nuestra realización y felicidad dependen de cuánto estemos conectados a nuestra Esencia.
La práctica de Qigong es una vía hacia esta conexión puesto que nos ayuda a aparcar la mente y a sentirnos profundamente, por ello implica un cambio de actitud en la vida hacia la positividad y la plenitud.